Comportamiento de las Ondas Cortas de Baja Frecuencia.

Espacio Diexista de Radio Bulgaria
Publicado: septiembre 15, 2008, Guardar


Tras haber examinado algunas de las propiedades de las ondas largas y medias vamos a ver ahora cómo se comportan las ondas cortas de bajas frecuencias. Conviene precisar que las ondas cortas ocupan el diapasón de frecuencias que van de 2300 a 26100 kilohercios.

Las partes en que se divide este vasto diapasón solemos llamar sectores o bandas que suman 14 en total. Debido a las fuertes perturbaciones atmosféricas en las zonas aledañas a los trópicos, las frecuencias ínfimas por su valor de las ondas cortas han sido asignadas para ser usadas en los países de esas zonas del mundo.

Las bandas se llaman tropicales y las integran: la de 120 metros, frecuencias de 2300 a 2495 kilohercios; la de 90 metros, frecuencias de 3200 a 3400 kilohercios y la de 60 metros, frecuencias de 4750 a 5100 kilohercios. Hay que indicar inmediatamente que entre las bandas de 60 y 90 metros se encuentra la banda internacional de 75, empleada por emisoras europeas y asiáticas como sigue: las frecuencias de 3900 a 3950 kilohercios y de 4005 a 4050 kilohercios están asignadas a transmisores asiáticos, y las que van de 3955 a 4005 kilohercios, a emisoras de Europa y de Asia. Estas últimas frecuencias se utilizan, básicamente, durante el invierno europeo ya que por la noche no hay buenas condiciones para la propagación por las frecuencias superiores, de las bandas superiores a la de 41 metros.

Las propiedades de las ondas por las bandas de 120 a 90 metros son similares a las que tienen las ondas medias pero también las cortas. De noche se propagan a grandes distancias y así algunas emisoras más potentes pueden ser captadas en otros continentes y, viceversa, de día, queremos decir cuando se está de día en la zona de residencia del escucha, esas emisoras no podrán ser captadas en las latitudes medianas.

Las emisoras que transmiten por las bandas tropicales conforman unas de las más pretendidas para la captación por los oyentes. Los más avezados de éstos se elaboran antenas especiales, adquieren receptores adecuados y bien saben en cuáles de los meses del año podrán captar las raras señales. Para las bandas de 60 a 120 metros es deseable utilizar las horas en que es de noche tanto en la zona donde se encuentra el transmisor como también en la de residencia del respectivo escucha. Además, ha de ser de noche también en la zona por la que cruza la señal radial.

A tal efecto el oyente debe tener ciertos conocimientos en astronomía y también manejar un globo terráqueo en el que comprobar en qué zonas de la Tierra es de noche. Así, por ejemplo, un oyente en Europa es capaz de sintonizar transmisores lejanos y de escasa potencia de Indonesia y de países vecinos a ésta, en los meses de octubre y noviembre en los que la noche es más larga y cubre una zona más extensa entre Europa y Asia Oriental.

Otro tipo de diexismo es el que se relaciona con la captación de emisoras de América Latina. Es actividad que se suele practicar durante la primavera europea. Las ondas empleadas por las bandas tropicales son caprichosas y sufren la influencia sustancial de diferentes fenómenos naturales. El mayor impacto que sufren es el causado por la actividad solar. Por ejemplo, tras la aparición de un recio viento solar, seguido por una tormenta magnética, la propagación de las ondas por las bandas tropicales sufre un franco deterioro y en tales momentos es tarea ardua captar señales lejanas. Los oyentes experimentados no sucumben a la desesperación sino que se esfuerzan por captar permanentemente, cada día, emisoras de los rincones más exóticos de la Tierra. Aquí ponemos punto final a este breve repaso de las ondas cortas de las bandas tropicales.